Cuando te piden algo diferente, algo artístico y original no siempre encuentras la inspiración. Una antigua fotografía puede limitar las opciones de crear lo que tu cliente exige. Por el motivo de ilustrar el cuadro y el cariño que le tengo a quien va dirigido este regalo tan especial, encontré la inspiración sin buscarla. Sin duda, un trabajo de los que se te sobrecoge el alma. En este caso, dadas las circunstancias, tuve claro lo que quería transmitir; el amor de un padre a su hija. Ese amor en el que no existen condiciones, en el que todo vale y el que siempre prevalece.
Para describir a Manuel se acabarían los adjetivos. Hombre de bien, trabajador, humano, luchador, bondadoso, extremadamente paciente, generoso… «Es alguien con quién puedes contar con solo levantar la mirada, siempre, siempre, siempre, está para cualquier persona que lo necesite» -Me contaba su hija conjugando los verbos en presente de indicativo con ápices de melancolía-.
«Donde quiera que te encuentres,
estaré contigo,
donde quiera que me encuentre,
estarás conmigo».Caminante
Me permito rescatar varias estrofas de la letra de una de las canciones más bonitas que se han escrito en la historia, dedicada a esas personas que ya se fueron y que pienso que cabe en este nuevo post:
Tu eres la tristeza de mis ojos
Que lloran en silencio por tu amor
Me miro en el espejo y veo en mi rostro
El tiempo que he sufrido por tu adiósObligo a que te olvide el pensamiento
Pues siempre estoy pensando en el ayer
Prefiero estar dormida que despierta
De tanto que me duele que no estés.
Alberto Aguilera Valadez • Copyright © Universal Music Publishing Group
Escuchar canción interpretada por Rocío Durcal.
