El pasado 15 de Julio vino al mundo la pequeña Daniela. Y lo hizo justo el día anterior al aniversario de bodas de sus papás, Lidia y Lolo ¡¡Menudo regalo de aniversario!!
Y es que, dicen que el ser padres es más que un regalo, es un sentimiento que envuelve infinitas sensaciones; ternura, alegría, felicidad, como también miedo, inseguridad, confusión… Y algunas otras incluso indescriptibles.
Cuando un nuevo bebé llega a la vida, viene acompañado de una ola de cambios y ajustes. Dado por hecho que el nuevo rol cambia al cien por cien tu modo de vivir. La adaptación a la paternidad no sucede por sí sola, es un proceso lento, una cuestión de tiempo, práctica, y mucha, mucha paciencia.
Para el bautizo de Daniela, Araceli, quiso hacerles un regalo especial y original, no solo por el parentesco y el cariño que les une, si no, porque Araceli y Lidia han compartido juntas muchos momentos de sus embarazos durante los nueve meses. Sus pequeñas casi nacieron al mismo tiempo, a tan solo tres días de diferencia.
Una fotografía de Daniela con sus papás, bastó para ilustrar con acuarelas digitales todo un regalo de aniversario para ellos.